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Córdoba fue una de las ciudades míticas del mediterráneo como la Atenas de Pericles, la Roma imperial, Bizancio o la Florencia de los Medicis. Su esplendor s
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Córdoba fue una de las ciudades míticas del mediterráneo como la Atenas de Pericles, la Roma imperial, Bizancio o la Florencia de los Medicis. Su esplendor se asocia a su papel como capital de al-Andalus entre los años 716 y 1031 gracias a un apogeo urbanístico. Pero parte de su magnificencia estribó en su capacidad para aglutinar e irradiar conocimiento, ciencia y pensamiento de la Antigüedad y de Oriente. En Qurṭuba y en la ciudad palatina Madinat al-Zahra deslumbraron médicos, inventores, astrónomos, poetas y músicos. Incluso en su declive, de las cenizas y el exilio también surgirían autores que alumbraron la Edad Media y asentaron las bases del Renacimiento. Este libro, ameno pero pleno de rigor histórico, se adentra en las vidas y logros de grandes poetas como Wallada, Ibn Ḥazm o Ibn Suhayd, eternos filósofos como Averroes o Maimónides, pero también recoge la labor de calígrafas, la gracia de zejeleros, la pericia de inventores o los innovadores tratamientos de médicos de los tres credos religiosos. Una transmisión de hechos y relatos de mano de los propios cronistas y biógrafos andal