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Este libro es una gallarda reivindicación de España y de sus métodos de colonización en el Nuevo Mundo. Avalora y encarece esta reivindicación el ser obra
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Este libro es una gallarda reivindicación de España y de sus métodos de colonización en el Nuevo Mundo. Avalora y encarece esta reivindicación el ser obra espontánea, desinteresada, y por ende imparcial, de un ilustrado escritor norteamericano, y fruto de sus estudios, investigaciones y concienzudos juicios. Basta leer el prefacio de su libro para poder apreciar el móvil que le impulsó a escribirlo y la sinceridad y entusiasmo que puso en su labor: «Porque creo que todo joven sajón-americano ama la justicia y admira el heroísmo tanto como yo, me he decidido a escribir este libro. La razón de que no hayamos hecho justicia a los exploradores españoles es sencillamente porque hemos sido mal informados. Su historia no tiene paralelo; pero nuestros libros de texto no han reconocido esa verdad, si bien ahora ya no se atreven a disputarla. Gracias a la nueva escuela de historia americana, vamos ya aprendiendo esa verdad, que se gozará en conocer todo americano de sentimientos varoniles. En este país de hombres libres y valientes el prejuicio de raza, la más supina de todas las ignorancias humanas, debe desaparecer.