EL PALACIO MALDITO
(Autopsia de la leyenda de los marqueses de Linares)
EAN 9788409449118
Encuadernación Bolsillo
Peso 400
Páginas 146
Tamaño 150mm X 210mm
Producto agotado
17,31 €
En mayo de 1990 salían a la luz en los grandes medios unas perturbadoras
psicofonías que apuntaban hacia un drama familiar: una niña sin madre y
una ma
info
En mayo de 1990 salían a la luz en los grandes medios unas perturbadoras
psicofonías que apuntaban hacia un drama familiar: una niña sin madre y
una madre buscando amargamente el cariño de su pequeña. Las voces del
palacio de Linares, a punto de convertirse en Casa de América, dieron la
vuelta al mundo del misterio y todavía hay quien conserva a buen recaudo
una cinta de casete con las grabaciones de la discordia. Reales o no, aque
llos sonidos escalofriantes pusieron en el mapa un palacio que permanecía
olvidado, abandonado, esperando su momento en una esquina de Cibeles.
: «¡Mamá...! ¡Mamá...! ¡No tengo mamá! ¡Mamá!».
Sea como fuere, allí se habían registrado, además de las psicofonías, otros
fenómenos paranormales. Los vigilantes de seguridad sentían escalofríos
en algunas habitaciones, y sus fieles perros guardianes se negaban a entrar
en según qué salas. Pero ¿fueron realmente ellos los que dieron la voz de
alerta? ¿Cuál es el origen del misterio del palacio de Linares?
psicofonías que apuntaban hacia un drama familiar: una niña sin madre y
una madre buscando amargamente el cariño de su pequeña. Las voces del
palacio de Linares, a punto de convertirse en Casa de América, dieron la
vuelta al mundo del misterio y todavía hay quien conserva a buen recaudo
una cinta de casete con las grabaciones de la discordia. Reales o no, aque
llos sonidos escalofriantes pusieron en el mapa un palacio que permanecía
olvidado, abandonado, esperando su momento en una esquina de Cibeles.
: «¡Mamá...! ¡Mamá...! ¡No tengo mamá! ¡Mamá!».
Sea como fuere, allí se habían registrado, además de las psicofonías, otros
fenómenos paranormales. Los vigilantes de seguridad sentían escalofríos
en algunas habitaciones, y sus fieles perros guardianes se negaban a entrar
en según qué salas. Pero ¿fueron realmente ellos los que dieron la voz de
alerta? ¿Cuál es el origen del misterio del palacio de Linares?
