Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
Muchas veces en misa recitamos sin saber qué decimos. Sin saber por qué lo decimos y desde luego sin saber qué queremos decir. Por ejemplo: ¿qué ocurre si
info
Muchas veces en misa recitamos sin saber qué decimos. Sin saber por qué lo decimos y desde luego sin saber qué queremos decir. Por ejemplo: ¿qué ocurre si dejas de recitar en misa el Credo con el piloto automático? ¡Pues seguramente te llevas una sorpresa! Esta manifestación de la fe, puede despertar en nosotros el escepticismo ante determinadas afirmaciones. «Creo en Dios Padre Todopoderoso», ¿y entonces el sufrimiento de Auschwitiz e Hiroshima?, «Creador del cielo y de la tierra», ¿y entonces eso del Big Bang y la evolución...?; etc., etc.
Este libro pretende dar un sentido cristiano -y sobre todo razonable- al Credo en su conjunto. Con toques de humor, sencillez y claridad, el Credo pasa a ser una manifestación comprensible y espiritualmente válida para creyentes un poco escépticos y escépticos un poco creyentes.